¿PUEDES PERMITIRTE PERDER CLIENTES?

La decisión de emprender una actividad empresarial es, por principio, un desafío. Se presentan multitud de factores que habrán de ser tenidos en cuenta en el proyecto emprendedor.

Los factores a considerar más recurrentes son: valor aportado al mercado, target del cliente buscado, mecanismos de distribución, alianzas estratégicas, costes y recursos financieros.

Existe, además, un factor que puede ser determinante: el entorno. En el proceso analítico del entorno habrán de ser contemplados, entre otros, los siguientes agentes: entorno económico del sector y del país; entorno legal, entorno de la competencia, etc.

La introducción en nuestro sistema legislativo de la responsabilidad penal de las empresas de los delitos cometidos por sus empleados y directivos constituye un elemento de riesgo esencial del entorno a analizar.

Como respuesta a este nuevo riesgo, el Código Penal establece una vía de solución: el  COMPLIANCE PROGRAM.

Esta novedosa exigencia legal no solo busca evitar riesgos penales sino, además y sobre todo, crear la reputación empresarial que sea transmitida al mercado como un valor de la empresa consistente en su alineamiento con las buenas prácticas corporativas y la ética empresarial.

En un mundo en el que la reputación de la marca es el mayor valor apreciado por el mercado, no implementar un COMPLIANCE PROGRAM puede ser la diferencia entre estar o no estar en el mercado; tener clientes o perderlos.